lunes, 23 de mayo de 2016

Eugenio Ampudia en el CAB.



Del 10 de junio al 18 de septiembre.Eugenio Ampudia.El videoartista Eugenio Ampudia llega al CAB con una instalación que propone una reflexión sobre los mecanismos productivos de la cultura y el papel del espectador.

La guerra en Siria de la ciudad de Palmira

Los rebeldes, por su parte, basándose también en vídeos, afirman que muchos lugares, especialmente la Ciudadela de Saladino (al norte), que alberga una ciudadela medieval, y el célebre sitio de Apamea, han sido bombardeados por el Ejército que intenta castigar bastiones de la oposición. Los actos de pillaje, que ya existían en el país, han crecido con los enfrentamientos violentos que asuelan Siria desde el estallido el 15 de marzo 2011 de las revueltas contra el régimen de Bachar al-Assad.
"Los arqueólogos todavía no han explorado toda Siria, así que allí donde se excave, se pueden hacer descubrimientos", señala Sakhel. "Pienso que estos ladrones son ciudadanos atraídos por el beneficio y que no entienden la importancia de lo que encuentran", añade y asegura temer que se pierda "una gran parte de la Historia". Piezas del museo de Hama (en el centro del país) han sido robadas, según los expertos. Se trata de armas antiguas y una estatua que data de la era aramea.



Los ladrones no entienden la importancia de lo que encuentran

Más al norte, en la ciudadela de Shaizar, encaramada sobre el río Oronte, ha sido perjudicada, mientras que al sur, en Apamea, una estatua romana en mármol has sido robada, según los expertos. Las piezas sustraídas, que transitan por Líbano y otros países vecinos, son en seguida vendidas en el mercado negro. También saqueada, la ciudad antigua de Ebla, en la provincia noroccidental de Idleb, ha sido arrasada por los combates entre el Ejército y los rebeldes.
En al castillo de Crac de los Caballeros, joya de la época de las Cruzadas e importante imán turístico, los guardias del lugar tienen prohibido el paso por hombres armados, según Sakhel. Para Michel al-Maqdiss, director general de antigüedades y museos de Siria, la zona en mayor riesgo es la región del macizo calcáreo, famoso por sus pueblos muertos próximos a Turquía. A finales de marzo la Unesco había pedido a las partes implicadas en el conflicto "asegurar la protección de su excepcional patrimonio", mientras que la oposición siria alzaba la voz de alarma, afirmando que los ataques del Ejército ponían en peligro los emplazamientos históricos.
Siria posee un importante patrimonio arqueológico e histórico. Su capital, Damasco, es una de las ciudades más antiguas del mundo. Seis lugares (la Ciudad Vieja de Damasco, Bosra, Alepo, Palmira, Crac de los Caballeros y la Ciudadela de Saladino) y los pueblos antiguos del norte están inscritos en la lista del patrimonio mundial de la Unesco. "Con Mesopotamia, Siria comparte las grandes etapas que han marcado los principales avances humanos, como el nacimiento de las primeras ciudades", explica Marc Griesheimer, director del departamento de Arqueología e Historia de la Antigüedad en el Instituto Francés de Oriente Próximo.
Las autoridades sirias han retirado ya numerosas piezas de los museos nacionales. La idea es que se ubiquen, en condiciones de seguridad, en la sede del banco central, indica Sakhel. "Espero que la comunidad internacional envíe un mensaje al pueblo sirio para decirle que es nuestro patrimonio lo que está en peligro. Es un patrimonio es todos los sirios, no del Gobierno ni del presidente, sino de la Humanidad", concluye.




Los ladrones no entienden la importancia de lo que encuentran

GUERRA EN SIRIA

El régimen sirio para los pies al Estado Islámico en Palmira

  • Casi 300 personas han muerto durante la ofensiva yihadista, hace cuatro días

  • Siria confirma que las valiosas ruinas de la antigua ciudad no han sido dañadas






     
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El gobierno sirio ha anunciado que sus tropas han expulsado este domingo al Estado Islámico (IS) del casco urbano de la ciudad de Tadmor, que alberga la joya arqueológica de Palmira. El pro opositor Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, que lo ha corroborado, ha cifrado en 295 el número de muertos en la localidad y alrededores desde que comenzó la ofensiva de los takfiristas, hace cuatro días.
A lo largo del sábado, según fuentes oficialistas, las huestes del IS habían logrado penetrar en el sector norte de Tadmor. Los bombardeos aéreos, combinados con acción terrestre, los repelieron. De acuerdo con el Observatorio, el IS se encuentra a apenas un kilómetro de las calles de la ciudad, situada en el centro de Siria, en la provincia de Homs.
Además, los yihadistas controlan los pueblos cercanos de Al Ameriya y Al Sujna. El Observatorio asegura que los duros combates de estos días en Tadmor, de 70.000 habitantes, dejaron 123 efectivos leales al régimen y 115 yihadistas muertos. Además, 57 civiles murieron, muchos de ellos decapitados por el IS al acusarlos de ser partidarios del presidente sirio Bashar Asad. La lucha sigue en el exterior de Tadmor y en la prisión local. Bombardeos asadistas mataron también a cinco personas este domingo en al Sujna.
Tadmor ha sido, a lo largo de los siglos, una localidad de alto valor estratégico. En el pasado, Palmira, un oasis en plena zona árida, era un punto de encuentro famoso en la ruta de la seda, el enlace mercantil entre Oriente y Occidente. Hoy, por Tadmor pasa la autopista que une la localidad oriental de Deir Az Zor, en manos del IS, con Homs y los aledaños de Damasco, territorio en manos de Bashar Asad.
El gobernador de Homs, Talal Barazi, ha detallado que el ejército oficialista está peinando la zona y que ha desactivado varios artefactos explosivos colocados por los yihadistas antes de retirarse. "Estamos tomando las precauciones necesarias, trabajamos para asegurar ayuda humanitaria ante la muchedumbre que abandona la ciudad", ha dicho. Barazi ha añadido que se han recapturado las colinas y puntos de control clave del norte.
Palmira, conocida como 'la perla del desierto', es un conjunto arquitectónico de los siglos I y II d.C. Antes de la guerra, iniciada en 2011, se trataba de uno de los principales destinos turísticos de Siria, un país rico en restos arqueológicos. El principal sitio de Palmira es el templo de Bel, dedicado a una deidad babilónica y cuyo techo, en el pasado, estaba chapado en oro.
Al adentrarse el IS en Tadmor, se temía que los restos de Palmira, listados como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, acabasen arrasados por los takfiristas. Así ocurrió recientemente en el museo de Mosul, en Nínive o en Hatra, en Irak. Palmira, sede de la legendaria reina revolucionaria Zenobia, todavía acoge en su museo una importante colección de tesoros extraídos del lugar.
El director de Antigüedades de Siria, Mamun Abdulkarim, expresó su alivio a la Agencia France Presse por la retirada del IS. "No hubo daño en las ruinas, pero eso no significa que no debamos tener miedo", explicó. Aunque él no lo diga en ese sentido, sí hay motivos para el temor. Según explican a EL MUNDO varios arqueólogos, las tropas de Asad llevan desde 2012 dañando Palmira al cavar allí trincheras, túneles y nidos de armas.